1) Indique que estructura anatómica esta
alterada en cada una de las enfermedades expuestas a continuación:
Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)
Enfermedad
debida al paso del contenido gástrico al esófago (reflujo). Se produce por
distintos factores como la incompetencia del esfínter esofágico inferior,
comidas grasas, tabaco, alcohol, chocolate, la menta, así como también ciertos
fármacos como es el caso de las benzodiacepinas, alteran el funcionamiento del
esfínter esofágico inferior. Factores genéticos y la obesidad también están
involucrados.
Se presenta
con pirosis (sensación de quemazón retroesternal ascendente) y regurgitación
(retorno del contenido esofágico a la boca) que aumentan tras la ingesta y con
la posición acostada.
El estudio más
importante para diagnosticar la enfermedad es la endoscopía.
Tratamiento:
evitar los alimentos antes mencionados, abstenerse de fumar, bajar de peso.
Como fármacos se utilizan dos tipos, ambos tienen la función de disminuir la
producción de ácido clorhídrico (HCL) del estómago: los antagonistas H2:
ranitidina, cimetidina, famotidina, etc y los agentes inhibidores de la bomba
de protones (IBP): omeprazol, lansoprazol, pantoprazol, etc. Estos últimos son
los fármacos de elección.
Gastritis
Inflamación de
la mucosa del estómago. Puede producirse por una infección (Helicobacter
pylori), por fármacos (AINE) o alcohol.
Úlcera péptica
Es una pérdida
de sustancia localizada de la mucosa y, en grado variable, del resto de las
capas de la pared gástrica o duodenal. Su aparición está vinculada con la
infección por Helicobacter pylori, una bacteria, que además se relaciona con la
aparición de cáncer gástrico.
En los países
subdesarrollados la tasa de infección es superior al 80 %, y en países
desarrollados del 60 %.
También se
asocia a la aparición de la enfermedad el aumento en la secreción de HCL.
Tratamiento:
se basa en triple esquema. Dos antibióticos (amoxicilina + claritromicina) y un
IBP. Otros antibióticos: levofloxacina, rifabutina, metronidazol, etc.
Gastropatía por antinflamatorios no esteroideos
(AINE)
La importancia
del uso de los AINE esta avalada por su amplia utilización como efecto
analgésico, antipirético y antinflamatorio. El uso crónico o irracional puede
llevar a efectos adversos como son lesiones en la mucosa gastroduodenal,
úlceras, y complicaciones como hemorragia digestiva y perforación.
Según el tipo
de AINE el riesgo aumenta. A continuación se enumeran de mayor a menor riesgo de gastropatía:
Ketorolac- Piroxicam
- Naproxeno
- Ibuprofeno
- Diclofenac
- Aceclofenac
- Celecoxib
Los
inhibidores selectivos de la
COX-2 (celecoxib, etoricoxib, lumiracoxib) se asocian a una
reducción de un 50 % del riesgo de desarrollar complicaciones
gastrointestinales altas y úlceras gastrointestinales frente a los AINE
tradicionales.
Tratamiento: Retirar AINE, indicar protectores
mucosa gastroduodenal como omeprazol, ranitidina o misoprostol.